viernes, 4 de mayo de 2012

Historia de hoy

La Historia tal como la conocemos es la suma continua de fechas y acontecimientos que marcan nuestra existir. Poder acceder a la memoria escrita de determinados hechos, que, ya son considerados como históricos, nos permite aprender del pasado e intentar no repetir errores. La Ciencia Histórica también nos posibilita volver por caminos que el hombre abandonó, pero que no estaría mal del todo seguir transitandolos. Hoy traigo un par de hechos significativos de la antigüedad, de los que igual nadie ya se acuerda; historia antigua pero de máxima actualidad. Presten atención:
Desde el año 1520 al 1522 se sucedieron en España actos continuados de rebeldía e insumisión a la figura del emperador Carlos I y V de Alemania. Muchos historiadores lo califican como una revuelta antíseñorial, otros como la primera revolución burguesa de la Era Moderna. El levantamiento se produjo en una situación de inestabilidad política, que se arrastraba desde la muerte de Isabel la Católica. En 1517, el rey Carlos I llegó a Asturias, proveniente de Flandes donde se había auto-proclamado rey de sus posesiones hispánicas. Llegó sin saber hablar apenas Castellano y trayendo consigo un gran número de nobles y clérigos flamencos como Corte, lo que produjo recelos entre las élites sociales castellanas, que sintieron que su advenimiento les acarrearía una pérdida de poder y estatus social (la situación era inédita históricamente). Hay que añadir también a todo esto una serie de malas cosechas, hambrunas y epidemias. Precios en el máximo histórico de aquel momento. Muchas ciudades del Reino de Castilla, algunas menos del reino de León y de Toledo deciden agruparse en Comunas independientes y desobedientes a la figura del Emperador. La campaña comprende revindicaciones contra los impuestos y los gastos derivados del Imperio. Si el rey se niega a atender las quejas de su pueblo, las Comunidades tendrían que tomar la defensa del reino. La historia a partir de aquí sigue con enfrentamientos, muchas batallas, algunas traiciones, la posterior derrota y finaliza con la  decapitación de líderes y cabecillas de la insurrección. 
Uno de Mayo de 1886, cientos de sindicalistas en EE.UU inician una lucha por conseguir reducir la jornada a ocho horas. En Chicago se encuentran con muchisímo peores condiciones que en otros Estados, así que, deciden continuar con la huelga durante el día dos y tres. Estos serán días cargados de enfrentamientos entre trabajadores y policía, días de violencia y batallas campales, días que finalizan con varios muertos y decenas de heridos. Treinta y un sindicalistas anarquistas (que finalmente quedarían en ocho) son detenidos y posteriormente juzgados por la Justicia Yanqui. Tres de ellos fueron condenados a prisión y cinco mandados directamente a la horca.  Ejecutados por lo que hoy, todavía, se entiende como un derecho laboral elemental. Pusieron fin a sus vidas en el intento de acabar con jornadas interminables, que podían alargarse hasta las catorce horas diarias... La máxima de "ocho horas para el trabajo, ocho horas para el sueño, ocho horas para el trabajo" sería una conquista de la clase obrera que todavía tardaría mucho tiempo en llegar.
 Como veis, la vida de los antiguos no era muy diferente de como vuelve a ser la de hoy. Siguen existiendo Imperios y clases dominantes, explotadores e impuestos abusivos, poder y justicia al servicio del mismo, miedo y represión. La policía o el ejercito sigue al servicio del Estado o del Imperio. Los de abajo seguimos sosteniendo privilegios para los de arriba. Pasa el tiempo y los hombres, llegan nuevas tecnologías y adelantos; pero, el mismo Sol de ayer es el que nos alumbra hoy. Nos sometemos como en el pasado, ignoramos el presente, aborrecemos el futuro. Dos ejemplos del ayer vuelven como muchos otros tantos.... Dos ejemplos del ayer vienen a desperezarnos. Dos buenos ejemplos y preferimos obviarlos.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario