domingo, 5 de agosto de 2012

Pienso, luego existo

Siempre nos asaltan los miedos a la hora de opinar y pensar. Continuamente estamos reprimiendo pensamientos y auto censurando opiniones. Es verdad, muchas veces son las que hablamos y mejor estaríamos con boquita cerrada. Otras tantas veces, nadie expresa en voz alta eso mismo que estabas pensando.
Existen muchas voces interesantes por oír. Esas voces, apagadas o distraídas en otra cosa, sería interesante que llegaran, también, a nuestros oídos. Deberíamos escucharnos más sobre esas cosas de las que  nunca hablamos. Pintemos entornos de conversación diferentes a los habituales. Dejemos a un lado lo banal, lo vacío y lo insignificante. Dejemos a otro lado nuestra vida personal. Olvidémonos del tiempo, si llueve, nieva o si ahora hace fresco. Prohibido hablar de lo que veas en radio, televisión o prensa. Sigamos el proceso hasta ver donde queda completamente desnuda la conversación. Seguro que muchas cabezas habrán tropezado con el concepto que entendemos por "la nada". Otras muchas se sorprenderán y ahí, en ese terreno, se encontrarán con muchísimas cosas. Tu cabeza igual te lo llega a agradecer. Tener una conversación en este terreno produce satisfacción. Conversar lejos de todas esas cosas que enmarañan nuestras vidas oxigena nuestra mente, nuestro pensamiento y afirma otras tantas veces nuestra forma de ser.
Es raro que nos lleguemos a comunicar con alguien de esta manera si no existe un clima de confianza absoluta. Es difícil comunicarse así y menos si no existe un pequeño grado de complicidad, amistad o camaradería. Nadie va por la vida así, solo los locos o los poetas.... para la vida cotidiana solo vale el hablar por hablar, las reglas de cortesía y educación y el dicharacherismo populoso de algunos aplaudido en casi todos los sectores de la vida por la mayoría de las personas. Porque ser extrovertido, bullanguero y alegre, vende. Ser tímido, encerrarse uno mismo en sus pensamientos y hablar solo cuando uno considera conveniente, aburre y excluye.
Ojala que todo lo que sale de nuestra boca no nos hiciera prisioneros. Ojala no tengamos miedo. Liberemos el pensamiento y la peligrosa idea. Que les de el aire. Tus pensamientos solo para ti no sirven de mucho, compártelos. GRACIAS............

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